Somos Ingrid (la soñadora empedernida), Rafael (mi esposo), Elian (mi caballerito andante de 11 años) y Génesis (mi princesa de 8 meses de gestación).Ciudadanos del mundo desde hace 3 años, cuando dejamos nuestra amada Venezuela y emprendimos un viaje de un mejor futuro para nuestra familia en Colombia.

Con mi caballerito Elian, se activó la chispa de un parto fuera de lo establecido por la sociedad (Aquamater- Venezuela). Sin embargo, mis temores internos, la presión familiar, la anestesia de una sociedad y de todo un sistema antinatural; me llevaron a inducir mi parto a las 39 semanas; lo cual lo terminó en una cesárea innecesaria. Fue un embarazo difícil de conseguir por mi Síndrome de Ovarios Poliquísticos. Finalmente, nuestro amado hermoso estaba con nosotros, y he podido crecer como mujer, como madre, como emprendedora; gracias a que mientras lo tenía en mi vientre, tuve la determinación de estar presente en su vida. Soy madre de tiempo completo y emprendedora/empresaria cuando las circunstancias me lo han permitido.

Hoy (luego de 11 años desde mi primer embarazo) estoy viajando sobre mi semana 32. El poder tener un segundo bebé era algo improbable para la ciencia médica dado que me fueron descubiertos 3 miomas diferentes que, aun siendo operados, no eran garantía de un embarazo efectivo. En mi semana 10 tuve una amenaza de aborto. La primera respuesta a mi fuerte sangrado fue un eco sonograma mal practicado que concluía que mi bebé no estaba allí. Escuchar de parte de la Dra que me atendió: Allí no hay nada, es solo el saco vacío, la naturaleza es sabia y por eso no permitió el progreso de tu embarazo; fue algo que me partió en dos por más de tres horas mientras me dejaban volver a mi casa.

Finalmente, antes de despacharme para mi casa, deciden realizar un trabajo de legrado y cuando me hacen un segundo eco; la sorpresa de mi corazón y del personal médico fue que allí SEGUÍA AFERRADA A LA VIDA mi hermosa princesa.

Fue una amenaza de aborto, fueron 6 semanas de absoluto reposo. Es una economía familiar golpeada, es una situación de poner a prueba la madera de la cual estoy hecha. Es la incertidumbre de apagar el sueño de parir en el calor de mi familia.

Sin embargo, NO ME RINDO y por no rendirme; al buscar e indagar en Facebook, cuentas de personas e instituciones que apoyan el parto respetado y en casa; y compartir en todos cuantos medios consigo una campaña de Gofundme que mi hermano me ayudó a crear (campaña que por cierto ha sido difícil de levantar, con la cual me he sentido juzgada por tener un segundo hijo a mis 39 años, en mi condición de emigrante y con la situación económica familiar que tenemos, etc, etc).
Allí me he sentido sola, había pensado que era la única madre con este sentir, con este deseo, con esta ilusión de parir junto a los que amo, en la calidez de un lugar que reciba a nuestra princesa. Pero por recomendación de un hermoso ser que no conozco aún, llegué a esta plataforma; donde pude ver que no estoy sola en mi deseo de parir como lo han hecho y lo siguen haciendo miles y miles de mujeres en todo el mundo, sino que también se encuentran igual que yo, aferrándose a un sueño, a su intuición; por encima del estatus de una cuenta bancaria.

Definitivamente, NO estoy sola, Génesis y yo NO estamos solas en este camino que ambas decidimos emprender.

Mi parto, ha de ser en una ciudad diferente a la que resido (Floridablanca), dado que parir en casa es algo mal visto y fuera de la “normalidad” y de la “seguridad”. Me debo trasladar a otra ciudad de Colombia (Cartagena); donde por mi fecha de parto, coincidiré con otros dos partos que atenderán dos hermosas Parteras de la Costa Caribe de Colombia (Carolina Zuluoga @parto.consentido y Paola Rodríguez @paolarodriguezdoulaypartera).

¡Gracias a Paramaparto por mostrarme que NO estoy sola, que NO estoy loca, que SI SE PUEDE!!!
Gracias a todos y todas los y las mecenas que decidan apoyar esta campaña.

Les digo de corazón que les agradezco con toda mi alma; y que estén donde estén, les envío el más grande y fuerte abrazo lleno de amor.

INGRID Y BRESHIT (Génesis). Aferradas a la vida!!!

Quiero dar lo de lo que tengo y de lo que soy.
Durante 9 años fui emprendedora y empresaria en mi país natal (Venezuela). La bendición con esa empresa fue total, crecí y aprendí muchas cosas. Aunque hoy no tengo un emprendimiento formalmente establecido en Colombia, SI tengo experiencia y conocimientos de cómo iniciar emprendimientos y hasta el día de hoy sigo creciendo y ampliando mi mente.Te ofrezco 2 horas de asesoría on-line (divida en dos sesiones) sobre cómo iniciar tu negocio o mejorarlo; siguiendo un Plan de Negocios.¡¡¡Bendiciones y siempre adelante, que si se puede!!!Ingrid